A lo largo de gran parte de su historia la Parroquia de Ntra. Sra. de la Asunción de l’Alcora alababa al Señor elevando cantos y plegarias acompañadas por la solemnidad del sonido de los tubos que conforman el instrumento considerado como el Rey de los instrumentos. Después de casi tres años desde el nacimiento del proyecto y encargo del órgano, estamos a un paso de inaugurarlo. Cuando el Sr. Obispo lo bendiga, el órgano responderá con su música y a pleno pulmón que está dispuesto a participar en nuestras celebraciones.
La inauguración se celebrará el día 13 de mayo a las 19:00H, en un emotivo acto presidido por el Sr Obispo D. Casimiro López, en la que será su primera visita a nuestra localidad.
Queremos agradecer la generosa donación de instituciones, empresas y particulares que, con el apadrinamiento de tubos, han hecho posible la realidad de este proyecto que quiere ayudar a los alcorinos en su oración y que, además, devuelve su puesto en la música a un pueblo tan fuertemente unida a ella.
Mn. Miguel Simón (Párroco)
Mn. Javier Aparici (Vicario)
BREVE HISTORIA
En los primeros contactos que tuvimos con D. Miguel y D. Javier hablamos, como es lógico, del estilo de órgano que se podía construir en la parroquia. El órgano es una máquina compleja y sobre todo un instrumento al servicio de la música y del culto, componentes que son determinantes a la hora de su concepción. ¿Qué música queríamos servir?. Quisimos privilegiar la música desde el siglo XV hasta principios del XIX, incluyendo a los más grandes compositores españoles, Cabezón (1500-1566), Correa de Arauxo (1575- 1654) ó J.B. Cabanilles (1644-1712) entre otros.
Una de las épocas de mayor creación de repertorio para órgano con pedal es sin duda la comprendida entre 1500 y 1750 en Alemania y centro de Europa con su punto culminante en las obras de Johann Sebastián Bach.
Pensamos rápidamente que el estilo de los instrumentos del norte de Europa podía cumplir todas nuestras expectativas. Propusimos entonces varios proyectos con la intención de inspirarnos por completo en aquellos instrumentos que fomentaron tanta música.
El instrumento iba a tener en principio 15 registros pero se transformó poco a poco para tener al final 18 registros.
Una de las épocas de mayor creación de repertorio para órgano con pedal es sin duda la comprendida entre 1500 y 1750 en Alemania y centro de Europa con su punto culminante en las obras de Johann Sebastián Bach.
Pensamos rápidamente que el estilo de los instrumentos del norte de Europa podía cumplir todas nuestras expectativas. Propusimos entonces varios proyectos con la intención de inspirarnos por completo en aquellos instrumentos que fomentaron tanta música.
El instrumento iba a tener en principio 15 registros pero se transformó poco a poco para tener al final 18 registros.
Construcción
Han sido necesarias casi 6000 horas de trabajo para llevar a cabo la construcción total del órgano.
Este proceso implica también la fundición de láminas de aleación plomo-estaño para la fabricación de todos los tubos, el cepillado y calibrado a mano de las planchas. Los análisis químicos de metal en instrumentos históricos revelaron que tenían siempre restos de bismuto, antimonio y cobre. Con el fin de acercarnos lo más posible a estas aleaciones y así garantizar un buen envejecimiento en el tiempo del metal y una mayor solidez de los tubos, fundimos metal con esos elementos para lograr láminas con las mismas características.
Los tubos de fachada son de una aleación de 77% de estaño y los tubos interiores tienen una proporción de 78% de plomo. Las bocas de los tubos son altas limitando así su contenido armónico y su anchura varía según los registros
Todos los elementos del órgano se han fabricado en el taller, desde los teclados, pedalero, secretos, fuelles, mecanismos etc,... trabajando siempre con materiales nobles y maderas macizas como el roble, el tilo, el boj, el ébano, etc. y con pieles de cordero de curtido especial, cuero, hierro, plomo y estaño.
Se ha tenido un cuidado especial en el diseño, proporciones y fabricación de la caja del órgano, utilizando roble y fabricando molduras anchas con castillos laterales a 60º y polígono central de 7 lados. Todo esta montado con ensamblajes tradicionales, llaves de madera, realizándose el acabado con el cepillo de carpintero y finalmente con una mano de cera natural.
La caja no es un simple decorado o armadura; su primera función es acústica y luego estructural, ya que tiene que sujetar y soportar todos los mecanismos, secretos, etc. del instrumento.
En ningún caso se utilizaron materiales no aptos en la práctica del arte de la organería, como contrachapados, aglomerados de madera, piezas de plástico, PVC, planchas de metal laminadas o cepilladas a maquina.
El único elemento de procedencia externa es el ventilador eléctrico que sirve para proporcionar aire a los fuelles de cuña.
Todo este trabajo, y lo que ha supuesto la construcción de este instrumento, se ha realizado gracias al empeño de Mn. Miguel y Mn. Javier, cura-párroco y vicario, y con las generosas aportaciones de los ciudadanos y feligreses de l´Alcora.
El teléfono, la televisión e Internet nos pueden acercar “al instante” a lo que se encuentra a miles de kilómetros de distancia. Nos hace sentir que “todo” está al alcance de la mano. La construcción de un instrumento de música para tocar un repertorio de al menos 200 años, nos vuelve a otra realidad. No se trata de un producto industrial, ni sale de una fábrica de alta producción, sino todo lo contrario. Se piensa, se estudia y se fabrica artesanalmente para que se pueda apreciar hoy y durante mucho tiempo. Es algo fuera de las modas pasajeras.
La creación de patrimonio es una preocupación que sigue siendo prioritaria para unos pocos en un mundo en el que los valores humanos están siendo relevados por el materialismo y el individualismo.
Con este magnifico ejemplar del “saber-hacer” de los artesanos del presente se ha traspasado el tiempo, y se ha puesto en marcha un personaje con voz propia, cargado de la memoria de sus gentes.
Cantará con el pueblo durante las liturgias y celebraciones, acompañando la gente tanto en los momentos felices como en los dolorosos, y convertirá el soplo en música y la música en canto y alabanza al Señor.
Este proceso implica también la fundición de láminas de aleación plomo-estaño para la fabricación de todos los tubos, el cepillado y calibrado a mano de las planchas. Los análisis químicos de metal en instrumentos históricos revelaron que tenían siempre restos de bismuto, antimonio y cobre. Con el fin de acercarnos lo más posible a estas aleaciones y así garantizar un buen envejecimiento en el tiempo del metal y una mayor solidez de los tubos, fundimos metal con esos elementos para lograr láminas con las mismas características.
Los tubos de fachada son de una aleación de 77% de estaño y los tubos interiores tienen una proporción de 78% de plomo. Las bocas de los tubos son altas limitando así su contenido armónico y su anchura varía según los registros
Todos los elementos del órgano se han fabricado en el taller, desde los teclados, pedalero, secretos, fuelles, mecanismos etc,... trabajando siempre con materiales nobles y maderas macizas como el roble, el tilo, el boj, el ébano, etc. y con pieles de cordero de curtido especial, cuero, hierro, plomo y estaño.
Se ha tenido un cuidado especial en el diseño, proporciones y fabricación de la caja del órgano, utilizando roble y fabricando molduras anchas con castillos laterales a 60º y polígono central de 7 lados. Todo esta montado con ensamblajes tradicionales, llaves de madera, realizándose el acabado con el cepillo de carpintero y finalmente con una mano de cera natural.
La caja no es un simple decorado o armadura; su primera función es acústica y luego estructural, ya que tiene que sujetar y soportar todos los mecanismos, secretos, etc. del instrumento.
En ningún caso se utilizaron materiales no aptos en la práctica del arte de la organería, como contrachapados, aglomerados de madera, piezas de plástico, PVC, planchas de metal laminadas o cepilladas a maquina.
El único elemento de procedencia externa es el ventilador eléctrico que sirve para proporcionar aire a los fuelles de cuña.
Todo este trabajo, y lo que ha supuesto la construcción de este instrumento, se ha realizado gracias al empeño de Mn. Miguel y Mn. Javier, cura-párroco y vicario, y con las generosas aportaciones de los ciudadanos y feligreses de l´Alcora.
El teléfono, la televisión e Internet nos pueden acercar “al instante” a lo que se encuentra a miles de kilómetros de distancia. Nos hace sentir que “todo” está al alcance de la mano. La construcción de un instrumento de música para tocar un repertorio de al menos 200 años, nos vuelve a otra realidad. No se trata de un producto industrial, ni sale de una fábrica de alta producción, sino todo lo contrario. Se piensa, se estudia y se fabrica artesanalmente para que se pueda apreciar hoy y durante mucho tiempo. Es algo fuera de las modas pasajeras.
La creación de patrimonio es una preocupación que sigue siendo prioritaria para unos pocos en un mundo en el que los valores humanos están siendo relevados por el materialismo y el individualismo.
Con este magnifico ejemplar del “saber-hacer” de los artesanos del presente se ha traspasado el tiempo, y se ha puesto en marcha un personaje con voz propia, cargado de la memoria de sus gentes.
Cantará con el pueblo durante las liturgias y celebraciones, acompañando la gente tanto en los momentos felices como en los dolorosos, y convertirá el soplo en música y la música en canto y alabanza al Señor.
Yann y Frédéric comienzan su formación como organeros en 1980 en Francia en distintos talleres hasta el año 1987, especializándose cada uno en un área (carpintería y tubería), trabajando en órganos históricos franceses de los siglos XVII y XVIII y en instrumentos nuevos de estilos sinfónicos y clásicos franceses.
En 1990, montan su propia empresa en Cuenca.
Su actividad se desarrolla en dos campos: La restauración de instrumentos antiguos y la fabricación de instrumentos de nueva planta. De hecho contamos con más de 30 instrumentos históricos restaurados en casi todas las regiones de España, incluyendo los órganos de la Catedral de Cuenca de D. Julián de la Orden.
Los órganos nuevos que se fabrican son mecánicos en su totalidad y realizados íntegramente en su taller, desde la fundición del metal para la fabricación de la tubería hasta la construcción de cajas, secretos, teclados, etc.
En la actualidad el taller está constituido por un equipo de diez personas y esta situado en Landete (Cuenca).
Frédéric Desmottes.
Landete – Cuenca
En 1990, montan su propia empresa en Cuenca.
Su actividad se desarrolla en dos campos: La restauración de instrumentos antiguos y la fabricación de instrumentos de nueva planta. De hecho contamos con más de 30 instrumentos históricos restaurados en casi todas las regiones de España, incluyendo los órganos de la Catedral de Cuenca de D. Julián de la Orden.
Los órganos nuevos que se fabrican son mecánicos en su totalidad y realizados íntegramente en su taller, desde la fundición del metal para la fabricación de la tubería hasta la construcción de cajas, secretos, teclados, etc.
En la actualidad el taller está constituido por un equipo de diez personas y esta situado en Landete (Cuenca).
Frédéric Desmottes.
Landete – Cuenca
