DEL 28 DE
ENERO AL 4 DE FEBRERO DE 2018
· Domingo 28 – IV del
Tiempo Ordinario - JORNADA DE LA INFANCIA MISIONERA
* Colecta
extraordinaria para la Infancia Misionera.
·
Miércoles 31 - San Juan Bosco
·
Viernes 2 – La
Presentación del Señor. - JORNADA
DE LA VIDA
CONSAGRADA –
Misas: 17 h., en La Foia y 18,30
h., en la Parroquia.
Primer Viernes: Misa Apostolado de la Oración, por
Dolores Amorós Garcés.
·
Sábado 3 -
A las 18 h., misa en San Francisco.
-
A las 19 h. misa en la Parroquia.
·
Domingo
4 – V del Tiempo Ordinario.
* Colectas destinadas a CÁRITAS.
ADORACIÓN DEL
SANTÍSIMO.
Miércoles 31 - De 17 h., hasta
la Misa, en la Parroquia. A las 18
h., tendremos el rezo de vísperas.
Jueves 1 - De 11 h., a 12 h., en San Francisco.
CONVOCATORIAS
- Lunes 29 - a
las 15,45 h., reunión de Vida Ascendente.
- Jueves 1 - a las 21 h., reunión de
todos los grupos del Itinerario de
Formación de Adultos.
JORNADA DE
LA VIDA CONSAGRADA
El dos de febrero, fiesta
de la Presentación del Niño Jesús en el Templo, celebramos la Jornada de la Vida
Consagrada. Los consagrados son
testimonio de la esperanza y de la alegría de la salvación que nos ha alcanzado
Jesucristo.
Valoremos la presencia en nuestro pueblo
de la Vida Consagrada, presente hoy en los “Hermanos de La Salle”
y las “Hermanas
Carmelitas de San José”.
UNCIÓN de ENFERMOS
El domingo 11 de febrero, a las 16,30 h., tendremos en la parroquia la
celebración comunitaria del sacramento de la Unción de Enfermos.
Quienes no puedan asistir y deseen recibirla,
avisen a la parroquia para realizarla en sus casas.
DOMINGO
IV/A del T.O.: Marcos 1, 21-28
“Estaban
asombrados de su enseñanza, porque les enseñaba
con autoridad y no como los escribas”.
El modo de enseñar de
Jesús provocó en la gente la impresión de que estaban ante algo desconocido
y admirable.
Lo señala el evangelio más antiguo y los investigadores piensan
que fue así realmente. Jesús no enseña como los
“letrados” de la Ley. Lo hace con
“autoridad”: su palabra libera a las personas de “espíritus
malignos”.
No hay que confundir “autoridad” con
“poder”. El evangelista Marcos es
preciso en su lenguaje. La palabra de Jesús no proviene del poder. Jesús no trata de imponer su propia
voluntad sobre los demás. No enseña para
controlar el comportamiento de la gente.
No utiliza la coacción.
Su palabra no es como la de los letrados de la
religión judía. No está revestida de poder institucional. Su “autoridad” nace de la fuerza del
Espíritu. Proviene del amor a la gente.
Busca aliviar el sufrimiento, curar heridas, promover una vida
más sana. Jesús no genera sumisión,
infantilismo o pasividad. Libera de
miedos, infunde confianza en Dios, anima a las personas a buscar un mundo
nuevo.
A nadie se le oculta que estamos viviendo una
grave crisis de autoridad. La confianza en la palabra institucional
está bajo mínimos. Dentro de la Iglesia
se habla de una fuerte “devaluación del magisterio”. Las homilías aburren. Las palabras están desgastadas.
¿No es el momento de volver a Jesús y aprender
a enseñar como lo hacía él? La palabra de la Iglesia ha de nacer
del amor real a las personas. Ha de ser
dicha después de una atenta escucha del sufrimiento que hay en el mundo, no
antes. Ha de ser cercana, acogedora,
capaz de acompañar la vida doliente del ser humano.
Necesitamos una palabra más liberada de la seducción
del poder y más llena de la fuerza del Espíritu. Una enseñanza
nacida del respeto y la estima de las personas, que genere esperanza y
cure heridas. J.A.
Pagola
Jesucristo viene con la autoridad de quien, primero,
da
la vida, ofrece la paz, vive la tolerancia,
regala
su persona, entrega lo mejor de sí mismo.
Javier Prat Cambra
