viernes, 20 de julio de 2018

HOJA INFORMATIVA Nº 1108


DEL 15 AL 22 DE JULIO DE 2018

CULTO EN ARAIA

Domingo 22 de julio a las 12 h., Misa

CULTO EN L’ALCORA

· Domingo 15 – XV del Tiempo Ordinario.
  9, -   h., en San Francisco
10, -   h., en La Foia y las Carmelitas
11,30 h., en la Paroquia
* A las 12,30 h., BAUTIZOS.

· Lunes 16 - No habrá misa a las 7,55 h., en las Carmelitas.
Ntra. Sra. del CARMEN.                               
11,- h., en las Carmelitas., misa en Honor a Nta. Sra. del Carmen e imposición del Escapulario.
· Sábado 21 - A las 18,30 h., misa en san Francisco.
- A las 19,30 h., misa en la iglesia parroquial.

· Domingo 22 - XVI del Tiempo Ordinario.

PORTADORES DEL CRISTO

    Se requieren voluntarios para portar el Cristo en la procesión de bajada del Calvario, el día del Cristo.     Seis personas que alternarán el llevar el Cristo y las cintas.   Y cuatro más para los faroles que acompañan al Cristo, durante toda la procesión.
Los interesados pueden pasar por la oficina parroquial.

DOMINGO XV / B del T.O.:  Marcos  6, 7-13

Jesús recorría los caminos de Galilea anunciando el Reino. Muchas personas sencillas le admiraban. Muchos se agolpaban junto a él para escuchar su Palabra o ser curados de sus enfermedades.  Esperaban una palabra de consuelo, un gesto de liberación para su situación.
Jesús camina además con un grupo de hermanos a los que  ha llamado a seguirle de cerca: son sus discípulos. Con ellos comparte su amistad y su tarea.
Al caminar por Galilea, envió a los discípulos que le seguían de cerca de continuar su obra, la misma que él estaba llevando adelante.  Los envió «de dos en dos». 
El único poder que reciben es aquel que se les da sobre los espíritus inmundos, sobre las fuerzas del mal. Se encontrarán con el sufrimiento de las gentes, con su desvalimiento, con el despojo de su dignidad.  Pero reciben de Jesús su fuerza para restablecer en muchas personas, como él hacía, la fe y el deseo de ponerse en pie y de seguir el camino desde una auténtica relación con Dios y con los hermanos. Las curaciones que Jesús lleva a cabo, su proximidad a las gentes, les ofrecen la certeza de que no están solos, ni olvidados de Dios.  Dios les quiere, más aun, son sus preferidos. Esto es lo que Jesús quiere que continúen anunciando los suyos. 
No les da Jesús, en cambio, ningún poder material, ni oportunidad de dominio. Al contrario, son enviados sólo con un bastón para el camino. Hay que ir detrás de Jesús sin alforja, ligeros de equipaje. La alforja servía como mochila para llevar la ropa, pero también para llevar el dinero, o los mendrugos de pan de los mendigos.  No se puede acumular riqueza para trabajar por el Reino, al contrario, hay que abandonarla.  Después del encuentro con Jesús ya no puede ir cada uno a lo suyo, buscando situarse.  Ahora, camino del Reino, de dos en dos, el mayor valor es Jesús y en torno a él deber ordenarse lo demás.
También hoy los seguidores de Jesús hemos de confiar en el poder que él nos otorga para resistir al mal,  a la injusticia, al olvido de tantas situaciones de dolor. Sólo para ello nos da Jesús su fuerza.  No para provecho propio, no para nuestro protagonismo ni para el lucimiento personal.
Si los discípulos de Jesús quieren compartir su tarea deben también compartir su vida; así se nos dice en este evangelio. 
La presencia de pequeños grupos de discípulos de Jesús en nuestra sociedad, tan necesitada de encuentro real y de amistad es la herramienta más valiosa que puede hacer presente la Buena Noticia.  
  Para ello es bueno no olvidar nunca
            cómo hace Jesús el camino y
            cómo envía a los suyos:
                        «de dos en dos»,
                        solo con un bastón,
                        haciendo el bien.
  Miguel Angel Vicente