DEL 16 - 23 DE MARZO DE 2008.
SEMANA SANTA 2008
· Domingo 16 – DE RAMOS.
HORARIO DE MISAS:
* 9’00h en San Francisco.
* 10’30h Bendición de Ramos en San Francisco, Procesión y Misa en la Parroquia.
* 11’00h en las Carmelitas.
* 12’30h en la Parroquia.
· Lunes 17 – A las 20h en la Parroquia, CELEBRACIÓN COMUNITARIA DEL PERDÓN.
· Miércoles 19 – A las 11h, en la Parroquia, Misa de la Caja Rural en honor de San José.
· Jueves 20 – JUEVES SANTO
HORARIO: MISA DE LA CENA DEL SEÑOR
* 18h, en San Francisco y en Araya.
* 20h, en la Parroquia.
HORA SANTA: 23h, en la Parroquia.
· Viernes 21 – VIERNES SANTO
HORARIO: * 10h, Vía Crucis en el Calvario.
CELEBRACIÓN DE LA PASIÓN DEL SEÑOR:
* 16h en San Francisco y en Araya.
* 17’30h en la Parroquia.
* 22h Procesión del Santo Entierro.
· Sábado 22 – SÁBADO SANTO
* 10h en la Parroquia, Celebración de la Palabra.
VIGILIA PASCUAL
HORARIO: * 20h en Araya.
* 23h en la Parroquia.
· Domingo 23 – PASCUA DE RESURRECCIÓN
HORARIO: * 10h Misa en San Francisco
* 11h Procesión del Encuentro y Misa
* 12h Misa en las Carmelitas
* NO hay Misa de 12’30h.
* A las 13h BAUTIZOS
CADENA DE ORACIÓN
Con motivo de la Jornada de Oración por las Vocaciones que se celebra el 13 de abril, la Delegación de Pastoral Vocacional ha organizado una Cadena de Oración por las Vocaciones. Se pretende que desde el viernes 11 a las 23h hasta el domingo 13 a las 24h, se rece ininterrumpidamente en nuestra Diócesis por las vocaciones.
En nuestra Parroquia se hará Exposición del Santísimo el Sábado 12 de 10h a 13h y el Domingo 13 de 16h hasta las 20h, además del rosario de antes de las misas que se rezará por las vocaciones.
Los que quieran se pueden unir a esta oración parroquial, pero si alguien a título personal en su casa y fuera de este horario, quiere dedicar media hora a rezar por esta intención, comuníquenlo a los sacerdotes, antes del domingo que viene, para facilitar la información a la Delegación.
Se puede rezar el rosario, hacer oración personal o el material que la propia Delegación nos facilitará.
CAMPANA DE SAN CRISTÓBAL
Hace unos días que la campana de la Ermita de San Cristóbal no hace su tradicional toque al mediodía porque se ha roto. La avería es grave.
Según el campanero que hace el mantenimiento del campanario, se ha roto el eje y de no pararla el ermitaño hubiese podido caer. Nos ha dicho que tiene difícil arreglo porque una reparación de urgencia sólo duraría unos meses y podría dañar a la misma campana (en estos últimos años se ha reparado varias veces la misma avería). Por eso aconseja cambiar toda la maquinaria e incluso el yugo de hierro por uno de madera para equilibrar bien la campana, ya que el actual yugo de hierro está desequilibrado y hace trabajar a la campana de lado.
Según el presupuesto, la reparación asciende a unos doce mil euros, dinero del que no dispone la parroquia porque se está haciendo frente a otras emergencias, como por ejemplo, unas vigas de madera que se han cambiado en el tejado de la casa del ermitaño de San Vicente para evitar el derrumbe, una reparación en la Iglesia de la Sangre, la intervención en el desván de la abadía…
Hacemos desde estas líneas una llamada a iniciativas para recaudar fondos con el fin de reparar la campana de San Cristóbal.
Estas próximas fiestas no podremos escuchar su sonido, y nuestro deseo al igual que el de la mayoría de los alcorinos, es escucharla lo más pronto posible.
DOMINGO DE RAMOS
La semana santa comienza con el domingo de Ramos de la Pasión Señor, que une el triunfo de Cristo, aclamado como Mesías por los habitantes de Jerusalén y hoy en el rito de la procesión de las palmas por los cristianos, y el anuncio de la pasión con la proclamación de la narración evangélica en la Misa.
Los ramos no son algo así como un talismán, ni un simple objeto bendito, sino el signo de la participación gozosa en el rito procesional, expresión de la fe de la Iglesia en Cristo, Mesías y Señor, que va hacia la muerte para la salvación de todos los hombres. Por eso, este domingo tiene un doble carácter, de gloria y de sufrimiento, que es lo propio del Misterio Pascual.
JUEVES SANTO
Son muchos los gestos que se evocan en el Jueves Santo. Uno de ellos es el signo de humildad y sencillez que realizó Jesús al lavarle los pies a todos sus discípulos, diciéndoles que ellos se los deben lavar unos a otros, "en verdad os digo que el siervo no es más que su señor, ni el enviado más que quien lo envió" (San Juan 13, 16).
El Señor, en muy pocas horas, antes de morir, nos deja tres regalos: el amor al prójimo, la Eucaristía y el servicio a los demás.
VIERNES SANTO
Es el día de pasión y muerte del Señor y del ayuno pascual como signo exterior de nuestra participación en su sacrificio.
No hay celebración eu carística, pero tenemos la acción litúrgica después de medio día para conmemorar la pasión y la muerte de Cristo. Cristo nos aparece como el Siervo de Dios anunciado por los profetas, el Cordero que se sacrifica por la salvación de todos.
La cruz es el elemento que domina toda la celebración iluminada por la luz de la resurrección, nos aparece como trono de gloria e instrumento de victoria; por esto es presentada a la adoración de los fieles.
VIGILIA PASCUAL
Es la "noche santa" en la que la Iglesia celebra, en la forma más expresiva, la obra de la redención como memoria, presencia y espera.
Los cristianos recordamos la noche en la cual Cristo sale de la tumba, victorioso de la muerte y esta memoria se hace realidad, porque sabemos que el mismo Cristo resucitado está presente en la comunidad que celebra el gran acontecimiento.
Hoy se celebra el acontecimiento pascual como "El Día del Señor". Este es el Domingo que da sentido a todos los domingos del año. Es el día del triunfo del Señor.
El Cirio Pascual está colocado al frente, cerca del altar, encendido durante todas las celebraciones litúrgicas del tiempo pascual hasta Pentecostés, simbolizando que Cristo Resucitado.
Las lecturas bíblicas de este día contienen lo que llamamos el Kerigma, es decir la proclamación novedosa del acontecimiento pascual y un llamado a vivir los compromisos con Cristo resucitado.
¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN!
¡Aclamad al Señor! ¡Él es nuestro Rey!
¡Venid a su mesa!
¡Se quedará para siempre en la Eucaristía!
¡Sirvamos con alegría!
¡En el servicio está nuestra grandeza!
¡Adoremos la cruz!
¡En ella, el Señor, dio el todo por nosotros!
¡Estemos en vela!
¡Jesús nos llevará de la oscuridad a la luz!
¡JESUS RESUCITÓ!
¡ALELUYA!
