sábado, 13 de agosto de 2011

HOJA INFORMATIVA Nº 747

DEL 14 AL 21 DE AGOSTO DE 2011

CULTO EN ARAYA EN VERANO

Domingo 14 a las 11h, Misa y Procesión.
Lunes 15 a las 12h, Misa.

CULTOS EN L'ALCORA


• Domingo 14 – XX DEL TIEMPO ORDINARIO.
* A las 12h, Misa en la Parroquia con los jóvenes franceses acogidos que participan en la JMJ.
* NO hay misas vespertinas

• Lunes 15 – SOLEMNIDAD DE LA ASUNCIÓN DE LA VIRGEN MARÍA. -
Horario de Misas como el Domingo-

• Sábado 20 – San Bernardo, abad y doctor.

• Domingo 21 – XXI DEL TIEMPO ORDINARIO.

JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD

El martes 16 a las 9h salen los jóvenes de nuestra Diócesis hacia Madrid para participar en la JMJ. Junto a ellos, los de nuestro pueblo. Les deseamos a todos que vivan unos días de fe junto al sucesor de Pedro.

¿QUÉ CREEMOS LOS CRISTIANOS DE LA VIRGEN MARÍA?

La Virgen María es Madre de Dios. Este dogma es el más importante y principal de todo lo que afirmamos y creemos sobre la Virgen María. María es Madre verdadera del Hijo de Dios, Jesucristo, la segunda persona de la Trinidad, la Persona del Verbo. Esta enseñanza está contenida en las Sagradas Escrituras y fue definida en el Concilio de Éfeso (431) contra los errores de Nestorio. Fue reafirmada, además, en los Concilios de Calcedonia (451) y en el segundo de Constantinopla (553) y enseñado ininterrumpidamente por otros Concilios generales y particulares siendo enseñanza común de los papas en los últimos 100 años. “Si el Hijo de María es Dios, evidentemente Ella, que lo engendró, debe ser llamada con toda justicia Madre de Dios. Si la persona de Jesucristo es una sola y divina, es indudable que debemos llamar a María no solamente Madre de Cristo hombre, sino Deipara, o Theotokos, esto es: Madre de Dios...” (Encíclica Lux Veritas del papa Pío XI (1931).
La Virgen María es Madre y Virgen. La virginidad perpetua de María es doctrina universal de la Iglesia profesada desde la época más antigua. Está anunciada ya en el Antiguo Testamento y claramente afirmada en el Nuevo. La Virgen María es Virgen en el momento de la concepción de Jesucristo porque su maternidad es por obra y gracia del Espíritu Santo, sin intervención de ningún varón. María es Virgen también en el parto porque el nacimiento del Hijo de Dios no quebrantó sino que con-sagró su virginidad como lo afi rma el Concilio Vaticano II (Lumen gentium 57). La Virgen María sigue siendo virgen después del parto porque no tuvo relaciones sexuales con ningún hombre y vivió casta y virginalmente con su esposo san José.
La Virgen María es Inmaculada porque fue con-cebida limpia del pecado original del que fue preservada en virtud de los futuros méritos de redentores de Cristo. Fue elegida pura y limpia porque Dios había previsto para ella que fuera la Madre de Jesucristo, el Hijo de Dios hecho carne para nuestra salvación. Ello requería, además, la respuesta libre y confiada de María (Lc 1, 38). Cada vez que rezamos el Avemaría es eso mismo lo expresamos: “Dios te salve, María, llena eres de gracia...”. El dogma de la Inmaculada Concepción de María fue proclamado y definido el 8 de diciembre de 1854 por el papa Pío IX en la Bula Ineffabilis Deus.
La Virgen María es asunta al cielo en cuerpo y alma. Es la fiesta que hoy celebramos, la Asunción de la Virgen María a los cielos. La Virgen Inmaculada, Madre de Dios, no es sometida a la corrupción del sepulcro si no que recibe así la gloria de la vida eterna. Esta enseñanza tiene su raíz y fundamento en la Sagrada Escritura que el Papa Pío XII recoge en la misma Constitución apostólica donde proclama este dogma: Munifi centissimus Deus del 1 de noviembre de 1950. En el libro del Genésis (3, 15) se anuncia ya la victoria de la mujer y de su Hijo sobre el pecado y la muerte.