DEL
22 AL 29 DE NOVIEMBRE DE 2015
CULTO EN L’ALCORA
·
Domingo 22 - JESUCRISTO, REY DEL UNIVERSO.
- Colectas para las
obras de la casa de Caritas.
- A las 12 h., misa y conmemoración de
Sta. Cecilia, patrona de los músicos.
·
Sábado 28 - A las 18 h., en San Francisco, aniversario
de Dolores Beltrán Mateu.
- A las 19 h., en la Parroquia, aniversario
de Salvador Bernat Pinardell.
· Domingo
29 – Primero de ADVIENTO.
ADORACIÓN DEL SANTÍSIMO. Miércoles
25 de noviembre
De 11h a 12h en San Francisco.
Desde las 17 h hasta la Misa , en la Parroquia.
* A las 18 h tendrá lugar el rezo de
vísperas.
CONVOCATORIAS
-
Lunes 23 a las 16, h., en los salones parroquiales, reunión de Vida Ascendente.
-
Lunes
23 a las 20 h., en los salones parroquiales reunión de los
voluntarios que participan en la recogida de alimentos para organizar equipos y
horarios.
-
Martes 24 a las 21 h., reunión de Lectores.
RECOGIDA DE ALIMENTOS
El
viernes 27 y el sábado 28 de noviembre el Banco de Alimentos realiza una recogida de alimentos no perecederos a nivel nacional. En nuestro pueblo los puntos de
recogida estarán situados en los supermercados “Consum”, “Masymas”, “Mercadona”
y “Economato”. Todos los alimentos que recojamos el Banco de
Alimentos los cede a Caritas parroquial.
JESUCRISTO, REY DEL UNIVERSO:
Juan 18,33b-37
CONTRA LA
MENTIRA José
Antonio Pagola
No es frecuente escuchar a alguien defender el derecho
del ser
humano a la verdad. ¿Por qué no se escuchan
en nuestra sociedad gritos de protesta contra la mentira, al menos, con la
misma fuerza con que se grita contra la injusticia?
¿Será
que no somos conscientes de la mentira que nos envuelve por todas partes? ¿Será que cuando exigimos justicia nos
sentimos solo víctimas y nunca opresores? ¿Será que para gritar contra la
mentira, la hipocresía y el engaño, es necesario vivir con un mínimo de sinceridad
personal?
La mentira es hoy uno de los presupuestos más firmes de nuestra convivencia
social. El mentir es aceptado como algo
necesario tanto en el complejo mundo del quehacer político y la información
social como en «la pequeña comedia» de nuestras relaciones personales de cada
día.
El hombre contemporáneo se ve obligado a pensar, decidir y actuar envuelto
en una densa niebla de mentira y falsedad. Indefenso ante un cerco de engaños, falacias y
embustes del que es difícil liberarse. ¿Cómo
saber la «verdad» que se oculta tras las decisiones políticas de los diversos partidos?
¿Cómo descubrir los verdaderos intereses que se encierran tras campañas
y acciones que se nos pide defender o rechazar? ¿Cómo actuar con lucidez en medio de la información deformada, parcial
e interesada que diariamente nos vemos obligados
a consumir?
En el fondo de toda persona hay una búsqueda de verdad y difícilmente se construirá
nada verdaderamente humano sobre la mentira y la falsedad. En el mensaje de Jesús hay una invitación
a vivir en la verdad ante Dios, ante uno mismo y ante los demás. «Yo
he venido para ser testigo de la verdad. Todo el que es de la verdad escucha mi
voz» (Juan 18, 37).
No es absurdo que se vuelvan a escuchar en nuestra sociedad
aquellas palabras inolvidables de Jesús, que son un reto y una promesa
para quienes buscamos sinceramente una sociedad más humana: «La verdad os hará libres» (Juan 8, 32).
EXAMEN ANTE EL TESTIGO DE
LA VERDAD
José Antonio Pagola
Dentro del proceso en el que se va a decidir la ejecución de Jesús, el evangelio de Juan ofrece un sorprendente diálogo privado entre Pilato, representante del imperio más poderoso de la Tierra y Jesús, un reo maniatado que se presenta como testigo de la verdad.
Precisamente, Pilato
quiere, al parecer, saber la verdad que se encierra en aquel extraño personaje
que tiene ante su trono: «¿Eres tú el rey de los judíos?» Jesús
va a responder exponiendo su verdad en dos afirmaciones fundamentales, muy queridas
al evangelista Juan.
«Mi reino no es de este
mundo». Jesús
no es rey al estilo que Pilato puede imaginar. No pretende ocupar el trono de
Israel ni disputar a Tiberio su poder imperial. Jesús no pertenece a ese
sistema en el que se mueve el prefecto de Roma, sostenido por la injusticia y
la mentira. No se apoya en la fuerza de las armas. Tiene un fundamento completamente
diferente. Su realeza proviene del amor de Dios al mundo.
Pero añade a continuación
algo muy importante: «Soy rey...y he venido al mundo para ser testigo
de la verdad» Es en este mundo donde quiere ejercer su realeza, pero
de una forma sorprendente. No viene a gobernar como Tiberio sino a ser «testigo
de la verdad» introduciendo el amor y la justicia de Dios en la historia
humana.
Esta verdad que Jesús trae
consigo no es una doctrina teórica. Es una llamada que puede transformar la
vida de las personas. Lo había dicho Jesús: «Si os mantenéis fieles a
mi Palabra...conoceréis la verdad y la verdad os hará libres». Ser
fieles al Evangelio de Jesús es una experiencia única pues lleva a conocer una
verdad liberadora, capaz de hacer nuestra vida más humana.
Jesucristo es la única
verdad de la que nos está permitido vivir a los cristianos. ¿No necesitamos en
la Iglesia de Jesús hacer un examen de conciencia colectivo ante el "Testigo
de la Verdad" ¿Atrevernos a discernir con humildad qué hay de
verdad y qué hay de mentira en nuestro seguimiento a Jesús? ¿Dónde hay verdad
liberadora y dónde mentira que nos esclaviza? ¿No necesitamos dar pasos hacia mayores
niveles de verdad humana y evangélica en nuestras vidas, nuestras comunidades y
nuestras instituciones?
Hay personas que se
alejaron hace mucho de todo esto, pero tampoco tienen nada contra Dios. En este
momento no sabrían cómo rezar; han olvidado las palabras del Padre Nuestro; no
les sale ninguna oración. ¿Es difícil decir a Dios: «Tú me conoces y me
entiendes. Ayúdame a vivir. Enséñame a creer»
Puede parecer algo trivial
y, sin embargo, una invocación sincera a Dios puede significar un cambio
interior importante. Las palabras de Jesús son alentadoras: «Todo el
que es de la verdad, escucha mi voz.»