DEL 10
AL 17 DE JUNIO DE 2018
CULTO EN ARAIA
Domingo 17 de junio a las 12 h., misa
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Domingo 10 – X
del Tiempo Ordinario.
HORARIO:
9 h., en San Francisco.
- 10 h., en las
Carmelitas y La Foia
- 11 h., en la Parroquia, misa y procesión, del
Sagrado
Corazón de JESÚS.
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Lunes 11 - San Bernabé, apóstol.
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Miércoles 13 - San Antonio de Padua
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Sábado 16 - A las 18,30 h., misa en San Francisco.
- A las 19,30
h., en la Parroquia, aniversario de Isidoro
Esteban Molina.
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Domingo 17 - XI
del Tiempo Ordinario.
ADORACIÓN DEL
SANTÍSIMO
Se suspende hasta comienzo del nuevo curso.
SAGRADO
CORAZÓN DE JESÚS
La
fiesta del Sagrado Corazón de Jesús puede traer a nuestra mente muchas imágenes
hoy trasnochadas del Corazón de Cristo.
Imágenes sangrantes, necesitadas de reparación: expiación y sacrificio,
donde la espiritualidad se transforma en ascética dolorosa y pesimista. O imágenes dulzonas, donde la «ternura» se
convierte en una cierta mirada acaramelada muy lejos de la fuerza y el valor de
un Jesús pionero de la libertad, la misericordia y la justicia de Dios.
Gracias
a Dios, los tiempos van cambiando y la devoción al Corazón de Jesús se
transforma en algo mucho más cercano a su fundamento bíblico y teológico.
El
Corazón de Jesús vivió asimilando el amor de Dios desde su intimidad con el
Padre y mirando a los hombres y mujeres de su tiempo. Ese amor, que debe ser nuestra raíz y nuestro
cimiento. Un amor en el que se hace pie
y donde el ser humano se enraíza. Un
amor que es mucho más profundo que unos ciertos gestos y miradas que quedan en
la superficie. Un amor inabarcable que supera
toda filosofía porque es «amor hasta el extremo»: fidelidad y entrega del
propio ser y de la vida.
El
evangelio de Juan señala la lanzada que traspasó el costado de Cristo, de donde
brota sangre (la Eucaristía como pan partido y vino derramado) y agua (bautismo
de Espíritu Santo, que es libertad de hijos, comunidad y compromiso creativo
por la justicia). Desde ahí se hace
explícita la misericordia de Dios, que es ternura porque se vuelca con la
debilidad innata de los hombres, no sólo de los grandes sino de los pequeños e
indefensos y llega hasta lo detalles más sencillos que refrescan las heridas,
que besan los dolores, como las madres besan el chichón del hijo pequeño y por
eso curan más.
El
amor del Corazón de Cristo nos invita a tener un corazón abierto al mundo y no
cerrado en la dulce intimidad in-trascendente.
Por eso el papa, a lo largo del
año, nos marca las necesidades del mundo sobre las que volcar ese amor
recibido.
Ángel Luís Gutiérrez
de la Serna
DOMINGO X / B del T.O.: Marcos 3, 20-35
«El que cumple la voluntad de
Dios, ese es mi hermano y mi hermana y mi madre»
Frente a la estrechez de mirasde quien no ve más
allá
de su familia, de sus conocidos, de aquellos que consideramos “los
nuestros”, Jesús plantea una familia universal únicamente medida por el cumplimiento
de la “voluntad de Dios”, que es el amor, la misericordia y la búsqueda del
Reino. A veces los otros se nos muestran como enemigos, como gente loca, como personas que uno no puede
comprender.
Jesús nos anima a aprender a vivir con
los otros.